Una contraseña puede incluir prácticamente cualquier carácter que pueda escribir (siendo las excepciones principales las teclas de control y la de retorno). Una buena contraseña ha de ser fácil de recordar pero difícil de adivinar. Los ejemplos de malas contraseñas incluyen:
Palabras que se pueden encontrar en un diccionario
Cualquier nombre común o popular
El nombre de una persona o un personaje famoso
Cualquier forma de su nombre o su nombre de usuario (por ejemplo: al revés, repetido dos veces, etcétera).
El nombre de su esposa, hijos o animales domésticos
Su fecha de nacimiento o la de un familiar
El número de la Seguridad Social, de su carnet de conducir, de su pasaporte o un número de identificación similar
Cualquier contraseña sencilla que aparezca en este manual o en otros
Las buenas contraseñas tienen ocho caracteres de longitud como mínimo. Además, deben incluir una mezcla de caracteres, como mayúsculas y minúsculas, números y signos de puntuación. Los ejemplos de contraseñas que serían buenas si no aparecieran en este manual serían:
Siglas, como "Eppa2gy2r" (que recuerde "El perro persigue a dos gatos y dos ratones")
Palabras sin significado fáciles de pronunciar, como "WumpaBun" o "WangDangdoodle!"
Frases mal escritas a propósito, como "6enpunnto" o "zarzaparrrillla"
No utilice estos ejemplos. Las contraseñas que aparecen en los manuales son las primeras que probará un intruso.