Las autorizaciones permiten a los usuarios realizar tareas específicas, por ejemplo, crear recursos compartidos, reiniciar el dispositivo y actualizar el software del sistema. Los grupos de autorizaciones se denominan ámbitos. Cada ámbito puede tener un juego de filtros opcionales que limitan la cantidad de autorizaciones. Por ejemplo, en lugar de otorgar una autorización para reiniciar todos los servicios, se puede usar un filtro para permitir reiniciar solo el servicio HTTP.