La infraestructura física subyacente constituye la base de cualquier configuración en la nube de OpenStack. Por lo tanto, la planificación de una implementación de OpenStack debe comenzar teniendo en cuenta los sistemas de hardware que se deben usar para la instalación de OpenStack.
En una configuración en un solo nodo, la preparación de un sistema físico es relativamente sencilla. No obstante, esta configuración no es adecuada para uso en producción porque un entorno de producción requiere varios recursos de hardware. Si bien al agregar más recursos aumenta la eficacia de la infraestructura de la nube, también aumenta la complejidad.